A diario cometemos errores, al caminar, ir al supermercado, al dormir o mirarse al espejo, muchas peligrosas para la salud.
Llevar tacos , su uso a diario afecta la postura, aumenta la presión sobre la espalda y las articulaciones de las piernas.
Cargar
bolsas pesadas, la postura de caminar torcida deriva en dolores de
espalda o el cuello. Por eso es importante no llevar en la cartera más
que lo necesario.
Ir
a dormir sin sacarse el maquillaje, implica un atentado contra la
salud de la piel, los cosméticos pueden provocar irritaciones e incluso
una infección.
Beber como un hombre es peligroso, la la simple relación peso/tamaño entre un hombre y una mujer lo dice todo.
Equivocarse
en la talle del soutien. El 80% de las mujeres no lleva su talla y esto
deja marcas, dolor de espalda, cuello y pecho, problemas circulatorios
e incluso padecer el síndrome del intestino.
Preocuparse
por todo, genera stress, aunque es reconocido lo difícil de no
hacerlo por la presión social a la que son sometidas las mujeres.
Comer
por impulsos, utilizar la comida para sentirse satisfecho, es común en
ambos sexos. Pero en las mujeres, generalmente se consuelan comiendo
cuando están tristes.
Dormir poco con repercusiones negativas en varios niveles: presión arterial, salud cardiovascular, humor y también obesiddad.
Normalmente
las mujeres se ponen siempre en último lugar. Pero es importante
aprender a decir que no a las peticiones y compromisos menos
importantes.
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