Maquillarse los ojos puede convertirse en una pesadilla, no solo por los productos , sino también por el resultado final que dan.

- Es importante que la máscara sea segura, que no te irrite y, posiblemente, que esté oftalmológicamente probada.
- Debes tener en cuenta el tamaño de las pestañas. Si tienes unas pestañas cortas, buscarás una máscara alargadora; si las tienes largas, buscarás una que te de más volumen, y si son lacias, podrás encontrar una máscara rizadora.
- Ten en cuenta que hay diferentes tipos de cepillo. Algunos, como el de la nueva máscara de Ésika, tiene tecnología 3D y tiene un diseño exclusivo que permite que sea flexible. Otras, como las convencionales, tienen un cepillo rígido que no permite mayor movilidad. Está en tu gusto escoger cuál prefieres.
- Si no eres amante del volumen o del color, puedes adquirir una pestañina transparente. Aunque no tienen el pigmento, estas también tienen vitaminas y pantenol, y te darán un acabado natural.

- Antes de empezar es fundamental la agitación del envase. Debes destapar y mover el cepillo dentro del recipiente para que la máscara se haga elástica y de un mejor toque.
- Se debe aplicar sobre las pestañas limpias, así se fijará mejor el producto.
- Si quieres que las pestañas queden rizadas, es aconsejable que primero se encrespen y después se apliquen las capas de la máscara. De esta manera, las pestañas no quedarán aplastadas y pegadas.
- Las mujeres tenemos entre 100 y 150 pestañas en el párpado superior, y de 70 a 80 en el párpado inferior. Por eso, la aplicación se debe hacer de la base a las puntas, así todas quedarán cubiertas.
- El número de capas que te apliques depende de tu gusto y del acabado y volumen que le quieras dar a tus pestañas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Si me dejas un mensaje te lo agradeceré, y más si es positivo, el blog lo realizo para mí con entusiamo y muchos que sí le interesan leerlo, Lumi.